El fraude de Stanford Financial Group asciende a 40 mil millones de dólares y se calcula que al menos 10 mil millones eran de mexicanos de todos los estados de la República, en especial de la capital y del norte: empresarios, ganaderos, políticos, profesionistas, comerciantes… Los registros indican inversiones individuales que van de 25 mil a 150 millones de dólares.
Según el despacho Castillo Snyder, de Texas, fueron tres mil 500 los connacionales defraudados. Otra versión fue develada en febrero de 2009 por el propio Stanford Group México, antes de su desmantelamiento: dos mil habían invertido en dólares en paraísos fiscales como Antigua.
Más del 60% no firmaron contratos, sólo certificados de depósitos en copias; alrededor del 20% de los afectados eran mayores de 65 años.
Según el despacho Castillo Snyder, de Texas, fueron tres mil 500 los connacionales defraudados. Otra versión fue develada en febrero de 2009 por el propio Stanford Group México, antes de su desmantelamiento: dos mil habían invertido en dólares en paraísos fiscales como Antigua.
Más del 60% no firmaron contratos, sólo certificados de depósitos en copias; alrededor del 20% de los afectados eran mayores de 65 años.
Aquí, en nuestro país, el grupo de Klinckwort ha documentado al menos una docena de fallecimientos relacionados con el desfalco. “Hemos visto cómo muchos de los defraudados se nos han ido adelantando: unos se quitaron la vida, otros cayeron muertos por infartos cerebrales o al miocardio… Unos más viven enfermos y qué decir de las personas de la tercera edad que habían planeado una vejez tranquila y hoy deben trabajar para sobrevivir”.
Los males se duplicaron a raíz de que despachos extranjeros —uno de los citados es Práctica Internacional de Strasburger— cerraron contratos jugosos con la promesa de recuperar el dinero, pero nada han logrado.
Los males se duplicaron a raíz de que despachos extranjeros —uno de los citados es Práctica Internacional de Strasburger— cerraron contratos jugosos con la promesa de recuperar el dinero, pero nada han logrado.
A dos años del fraude de Stanford Fondos y de que su presidente en México, David Nanes, se diera a la fuga, el recuento de daños incluye inversionistas que optaron por el suicidio, familias desintegradas, ancianos enfermos y solitarios, viudas en depresión irreversible.
Al revelarse la intención del bufete de abogados Cárdenas-Amerena de lograr un amparo para impedir la orden de aprehensión en contra del presunto defraudador —ya admitida a trámite por la juez federal Sandra Robledo Magaña, quien citó a audiencia para el 24 de marzo—, defensores de estafados piden a la juzgadora una resolución honesta e imparcial y al Consejo de la Judicatura vigilancia al proceso, mientras afectados adelantan protestas y descifran el modo de operación de Nanes, a quien describen como un “conspicuo delincuente de cuello blanco” y un “experto en argucias financieras”.
Al revelarse la intención del bufete de abogados Cárdenas-Amerena de lograr un amparo para impedir la orden de aprehensión en contra del presunto defraudador —ya admitida a trámite por la juez federal Sandra Robledo Magaña, quien citó a audiencia para el 24 de marzo—, defensores de estafados piden a la juzgadora una resolución honesta e imparcial y al Consejo de la Judicatura vigilancia al proceso, mientras afectados adelantan protestas y descifran el modo de operación de Nanes, a quien describen como un “conspicuo delincuente de cuello blanco” y un “experto en argucias financieras”.
—¿Puede ser casual que el despacho Cárdenas-Amerena haya presentado la demanda ante la juez Robledo Magaña? —se le pregunta.
—Ellos deben conocer a detalle los antecedentes de la juzgadora, desafortunadamente el Poder Judicial Federal tiene elementos proclives a la corrupción, el dinero ha trastocado la honorabilidad y persiste el temor de que el soborno impere sobre la justicia; se han ganado a pulso la falta de credibilidad, porque muchas veces los juzgados se convierten en prostíbulos.
Enlace:
[] Noticia: Solicitan a la judicatura vigilar a jueza que revisa amparo para David Nanes.