El gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, basó su campaña en una serie de compromisos “firmados ante notario”. Como movimiento publicitario, su éxito fue rotundo.
Lo delicado es que desde el principio ha jugado con la ignorancia de la gente. Así, por ejemplo, nos podemos preguntar si la campaña hubiera tenido tanto éxito si el lema hubiera sido “te lo firmo ante notario, que por supuesto no puede hacer nada ante mi incumplimiento”. Por más que quisiese elevarse la función notarial mexiquense, se ve difícil que pudiera volverse una contraloría ya no de los compromisos de los políticos, sino del más pingüe contrato que se pasara ante su fe. Simplemente no le compete denunciar el incumplimiento de nada.
Los compromisos fueron cumplidos, lo que trajo tranquilidad a los juzgadores mexiquenses, que estarían en un serio aprieto si algún “vivo” ejercía una acción para obtener dádivas del gobierno prometidas ante notario. Y si acaso alguna no fue cumplida, ¿Quién podría ejercer la acción? ¿Conocería el tribunal contencioso, a pesar de haber sido un compromiso que un ciudadano sin ningún cargo asumió? ¿Podría demandarse el cumplimiento de acciones programáticas que no han sido oficializadas por el gobierno?
Pero sigamos en que los compromisos ya se cumplieron. ¿Cuál es la envergadura de dichos compromisos? ¿Qué tan relevantes son para el desarrollo de dicha entidad federativa? A estas preguntas, el diputado mexiquense Alejandro Landero presenta las siguientes respuestas:
1) Su cumplimiento implicó sólo el 2% del presupuesto del Estado de México.
2) En ese 2%, hubo participaciones federales, es decir, que Peña Nieto cumple sus compromisos con dinero ajeno, sin la mínima honestidad de aclarar el origen de los recursos.
3) Los compromisos no fueron enfocados a acciones de fondo, lo que revela por qué si el Estado de México de 2005 a la fecha, ha visto incrementar su presupuesto un 62%, se encuentra aún por debajo de la media de desempleo. Tampoco le ha ido mejor en seguridad (primer lugar en homicidios contra mujeres y en robo de autos).