Las comparaciones con Churchill abarcaron la mayor parte de los comentarios y encabezados de los periódico, pero no dieron cuenta de otra situación: lo que hizo Felipe Calderón en ese acto, fue también pedir a los 1800 delegados del gobierno federal que formaran parte de la campaña política a favor de Acción Nacional.
Esto lo dio a conocer el diputado David Penchyna, quien pidió se investigara y se intensificara la supervisión de recursos del gobierno con fines electorales:
“Lo más grave, desde un punto de vista legal y político” es que el discurso presidencial fue, de principio a fin, “un llamado explícito a servidores públicos federales a que, en el ejercicio de su función, se ocupen de hacer proselitismo en los próximos 18 meses que restan a este gobierno, sin importar los procesos electorales a efectuarse en esos periodos”, por lo que propuso a la Junta de Coordinación Política del Congreso de la Unión, tome cartas en el asunto.
No dudamos que pasará totalmente desapercibida su propuesta. Es una lástima que los ciudadanos no contemos con los elementos suficientes para que estos hechos no se queden en la impunidad.
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[] Noticia: Urgen supervisar a delegados Federales.