Sigamos con las frases burdas del señor Krauze:
“Tenemos un mejor arreglo institucional”: Arreglo, en su segunda acepción según el diccionario ya citado, es “regla, orden, coordinación”. ¿Saben? Es posible que sí exista un mejor orden. Lo conflictivo está en el “tenemos”. ¿Desde cuándo son nuestras las instituciones? Que la radio o la televisión digan que las instituciones sirven a la ciudadanía es una cosa. Las instituciones mexicanas por lo general no sirven, ya mucho menos sirven a la ciudadanía. Sirven a unos cuantos, por lo cual quedaría mejor el impersonal “hay un mejor arreglo institucional”.
Latinoamérica “llega razonablemente bien” a la celebración de los bicentenarios independentistas: Latinoamérica no llega bien a estas celebraciones. El adverbio “razonablemente” de forma oportuna hace que contengamos nuestros “¡Viva México!” y que esperemos un poquito antes de celebrar. No llegamos “bien”, llegamos “razonablemente bien”. Una vez más, acudamos a la siempre útil analogía:
El señor Padilla sufrió un terrible accidente al estrellarse de frente con el metrobús, mientras circulaba en su bicicleta. La familia teme lo peor. Al llegar el médico, les informa que el señor Rodilla va a sobrevivir, y la fiel esposa pregunta:
¿Quedará bien?
El médico, con tacto, contesta:
“Bueno, no… pero estará razonablemente bien”.
Tétrico, ¿no es así? Porque estar “razonablemente bien” puede bien significar “oiga, señora, al menos está vivo. Claro, sus funciones fisiológicas se han retrotraído a las de un niño de 4 años y su cara parece, bueno, a lo que se parece una cara que se estrella con un camionzote de varias toneladas”.
Así que llegamos al bicentenario “razonablemente bien”. Al menos seguimos vivos. Bueno, aquí alguien se burla de nuestra inteligencia. ¿Vale la pena festejar que hemos sobrevivido 200 años en condiciones miserables? Se nos tachará de exagerados, pero sí, al menos las de México son condiciones miserables. La cantidad de muertos en nuestro país es escandalosa, por poner un ejemplo, y no podemos llamar vida digna a la que tiene un pie en el otro mundo. Los que tenemos la fortuna de seguir vivos tenemos el deber honesto de reflexionar sobre el país terrible que hemos construido o al menos tolerado (no se hizo solito), y no andar festejando sobre la tumba de tantos fallecidos.
Enlace:
[] Noticia: América Latina es hoy más madura que en toda su historia: Enrique Krauze