La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) expresó su preocupación por la detención de más de 200 jóvenes “reguetoneros” realizada el pasado domingo, la cual pudo haber procedido con violaciones al debido proceso y a las garantías judiciales de los detenidos.
Por medio de un comunicado, el organismo informó que ya ha
abierto una investigación de oficio por “violaciones al derecho a la libertad
personal y la obligación de proteger el interés superior de más de 250 niñas,
niños, adolescentes y jóvenes detenidos como parte de un operativo de la
Secretaría de Seguridad Pública”.
De hecho, la Comisión señala que Visitadores y Visitadoras
permanecen en la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF)
documentando y dando acompañamiento al caso.
Entre las cuestiones clave que indaga la CDHDF está el
investigar si esto se trató de lo que denominan un “operativo razia”, donde “se
detiene a jóvenes por estar en un lugar o por su apariencia”, lo cual “pone en
riesgo la integridad de las personas detenidas”.
Este tipo de detenciones, según señala el boletín, ya se había
llevado a cabo en otros casos suscitados en la capital, por lo cual la CDHDF había
ya dado una recomendación, tanto a la PGJDF como a la SSP, para evitar proceder
de esta manera.
Las presentes indagatorias surgen, según reportan, por medio de los
testimonios que hasta ahora se han obtenido de los Visitadores, donde destaca
el hecho que “muchos de los adolescentes no fueron detenidos ocasionando
disturbios, sino que afirman haber sido detenidos por su apariencia de “jóvenes
reguetón” ”.
La investigación sugiere que muchos de esos menores al momento
de su detención “estaban comiendo tacos en puestos de vía pública, incluso en
lugares establecidos y que fueron sacados de los mismos”.
Otro de los puntos clave dentro de lo que ha recabado la CDHDF
está el hecho de que la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal
(SSPDF) tardó en ponerlos a disposición ante el Ministerio Público casi seis
horas.
Las denuncias también han venido por
parte de los familiares de las personas que fueron detenidas, por lo que el organismo ha solicitado a la Procuraduría capitalina que “como parte del derecho a la
defensa de los jóvenes se proporcione a sus familiares la información
correspondiente”.
El domingo 15 de julio un grupo de jóvenes se reunió en la
colonia Roma, en la Calle de Querétaro, con el fin de asistir a un concierto de
reggaetón difundido en redes sociales, que en realidad no estaba programado.
Esto generó la molestia de
los jóvenes, quienes ocasionaron disturbios en la Glorieta de Insurgentes, la
estación del Metro Insurgentes y en Paseo de la Reforma.
Según los señalamientos
directos de personas que presuntamente fueron víctimas de las agresiones y
reportes de la SSPDF, estos jóvenes habrían lanzado petardos y alterado el orden en los lugares antes referidos.