Agustín Estrada Negrete, fue retirado de la escuela que dirigía, los motivos para hacerlo pueden ser discutibles, (el maestro se vistió de mujer en un festival contra la homofobia, en el Estado de México). Lo que si es inaceptable es lo que sucedió con motivo de su posible reinstalación. Explicamos los hechos:
Días después de la manifestación-17 de mayo del 2007- fue presionado por autoridades que le pidieron licencia del cargo de Director de la escuela para niños con discapacidades. El director aceptó y tiempo después intentó regresar a su cargo, pero la licencia de la escuela había terminado.
El director se presentó en la escuela, con madres de familia que lo habían ayudado a construir la escuela, en lo que antes era prácticamente un basurero,las que sostienen que defendieron al maestro por justicia, porque él construyó la escuela, en ese momento se encontraron con la policía del estado. Y ahí es donde surgen los hechos violentos, narrados por Proceso:
Una multitud de policías entra a escena, acorralan a los manifestantes. Un grupo se va contra la quinceañera Alejandra Guzmán, y aunque ella les advierte que sufre convulsiones, la masa uniformada la arrastra de los pelos, la empuja, la patea y la avienta a una patrulla, como si fuera un bulto. Alguien la envuelve en una cobija antes de llevarla a la Procuraduría. La niña recuerda que la querían desmayar a golpes en la cabeza y que, antes de desvanecerse, tenía una agente saltándole sobre la cadera y otra sentada encima.
"Me dijeron que si me moría sería mejor para ellos, así nomás me iban a aventar a un barranco a que me comieran los perros. Una me metió un puñetazo en la boca, me azotaron la frente contra una banqueta para desmayarme a puro golpe de cabeza. En la patrulla me desmayé porque iba una sentada en mi cabeza y otra brincando en mi cadera. Cuando desperté estaba en el MP, me acusaron de que estaba teniendo relaciones en un carro”, dice la quinceañera Alejandra Guzmán, quien es de lento aprendizaje.
En febrero ya había ocurrido un desalojo similar en esa escuela para niños especiales. Entonces varios menores de edad se convulsionaron, mamás y papás fueron golpeados, y niños como Luis Lezama, de 11 años, que quería defender a su hermana sorda de la golpiza, debió tragar gases lacrimógenos. Otra niña, Julia Daniela, de ocho años y con microcefalia, fue empujada por policías y su mamá aventada por tratar de defenderla.
Los aventones también le tocaron a Julia Daniela, una niña de ocho años con microcefalia, que fue llevada a la bodega para que su mamá diera su testimonio. Ella es una de las menores que no volverán a clase al CAM y que se la pasa encerrada en casa.
El ex-director fue llevado a Almoloya donde fue violado:
Pasó la noche de pie en la celda 4 por falta de espacio. Uno de los inquilinos le prestó una pantalonera azul y una sudadera con capucha. Al día siguiente, otro le aconsejó que llamara a su familia para avisarles dónde estaba. Mientras pasaba entre las celdas 1 y 2, sintió un golpe en la espalda, le taparon la cara con la capucha, lo patearon, lo asfixiaron, lo jalaron hacia una celda, lo sostuvieron entre varios de las manos y los pies, le desgarraron la ropa y lo violaron por turnos.
“Fueron aproximadamente 12 los que lo hicieron”, llora mientras lo narra.
El mismo cuerpo policiaco que realizó los actos de Atenco, ahora acusado de golpear niños, ¿En qué clase de personas confíamos nuestra seguridad?
[] Noticia: Peña Nieto, homofóbico y represor.