El primer tomo de la novela Tu rostro mañana, del escritor Javier Marías comienza con esta frase:
"No debería uno contar nunca nada, ni dar datos ni aportar historias ni hacer que la gente recuerde a seres que jamás han existido ni pisado la tierra o cruzado el mundo, o que sí pasaron pero estaban ya medio a salvo en el tuerto e inseguro olvido. Contar es casi siempre un regalo, incluso cuando lleva e inyecta veneno el cuento, también es un vínculo y otorgar confianza, y rara es la confianza que antes o después no se traiciona, raro el vínculo que no se enreda o anuda, y así acaba apretando y hay que tirar de navaja o filo para cortarlo."
El libro que precisamente habla sobre lo que decimos, y sus repercusiones en el futuro, incluye una serie de imágenes de propaganda utilizada en la segunda guerra mundial por el gobierno británico en las que se le pedía a las personas callar porque su palabra oral podría costar vidas humanas. El lema era "Careless talk costs lives" ("Hablar sin cuidado cuesta vidas"). Ahora, según informa el diario el País, el Ministerio de Defensa británico retoma aquella campaña. Transcribimos a continuación la nota:
El Ministerio de Defensa británico ha retomado y modernizado ese eslogan para prevenir que haya filtraciones de información sensible a través de Twitter,Facebook, de mensajes cortos o blogs. En vez de "Tuitear sin cuidado cuesta vidas", el lema del ministerio de Defensa es "Think before you tweet" "(Piensa antes de tuitear").
En el anuncio lanzado a través del Facebook y el canal de Youtube del Ministerio de Defensa, la madre de un soldado está chateando con su hijo que es un militar destinado en Afganistán. "Hola mamá, mañana es un gran día, una persona VIP viene a vernos a la base", escribe él.
Inmediatamente, la orgullosa madre comparte la información en su muro y nada más publicarse suena el timbre de la casa. Es un terrorista armado a quien ella invita amablemente a sentarse en su salón y charlar tomando un té. En los anuncios de los años 40 era el propio Hitler quien escuchaba detrás de las cabinas de teléfono o sentado detrás del militar charlatán en un autobús.
El anuncio ha sido criticado por lanzar un mensaje atemorizador a las fuerzas armadas y sus familias. "Estas cosas pasan y no queremos dar ventaja al enemigo", ha afirmado un portavoz del Ministerio. "No queremos que los soldados y sus familias tengan miedo y tampoco que dejen de utilizar las redes sociales, pero queremos que tengan cuidado al utilizarlas y que conozcan los riesgos de compartir demasiada información. Ha habido casos recientemente de miembros de nuestras tropas que han aireado la fecha y la hora en que iba a partir un avión y ha tenido consecuencias pero no puedo entrar en detalles".
Enlance: http://www.elpais.com/articulo/tecnologia/Tuitear/cuidado/cuesta/vidas/elpeputec/20110615elpeputec_8/Tes